lunes, 25 de julio de 2022

Tour de Francia 2022. Pirineos.

Un año más, desde 1988, he acudido a ver unas etapas del Tour de Francia a Pirineos. Desde hace ya unos años voy con varios amigos de la S.C. Bilbaina y este año hemos hecho un poco de cicloturismo, hemos visto la carrera (algunos) y hemos hecho algo de monte. Para rematar, el sábado, antes de volver a casa, celebré mis 59 años subiendo al Taillon, un tresmil del Pirineo relativamente fácil de subir desde el Col de Tentes.

Tourmalet.

Os pongo unas fotos mientras os explico el viaje.

El martes, después de llegar a Luz St. Sauveur y ver la etapa, fuimos hasta Gavarnie en bici. Tuvimos que bajar rápido porque llegó una tormenta y nos mojamos. Fue el único día que hemos tenido mal tiempo.

El grupo de los mayores subiendo a Gavarnie.

Al fondo se ve la Brecha de Roland, a donde subiría el sábado de camino al Taillon.

Subiendo a Gavarnie (foto de Diego).

Vistas desde el apartamento. Por cierto, para llegar a los apartamentos teníamos que subir desde el pueblo un kilómetro al 10%.

El miércoles algunos fuimos a la Hourquette d'Ancizan a ver el Tour y otros hicieron diferentes rutas en bici.

Esperando al Tour en la bonita subida a la Hourquette d'Ancizan.


Llega la caravana. Un clásico del Tour.

El grupo de los favoritos subiendo fuerte.

El jueves fuimos a Hautacam a ver la carrera. Yo antes subí al Tourmalet, como me gusta hacer todos los años. Creo que llevaré unas 40 ascensiones.
Por cierto, cómo suben los pros, y no solo los de delante. Para los que piensan que los esprinters no suben os daré el dato de que uno de nuestros compañeros, Gontzal Bilbao, que fue ciclista sub23 y que compite ahora en atletismo y en duatlón a nivel de disputar las victorias, subió Spandelles dándose caña en el mismo tiempo, según Strava, que Kristof, uno de los esprinters del Tour y los de delante le sacan un minuto por kilómetro aproximadamente. Casi nada.

Al comienzo del puerto, en Luz, han colocado este mojón y unas placas en la acera a modo de paseo de la fama del Tour.

En la cima, una vez más. Por cierto, están de obras arriba, construyendo un edificio nuevo y no está la estatua del gigante.

Última curva en la zona más dura. Creo que hice mi récord de subida más lenta (2:04) y mi récord de bajada más rápida (26 minutos). Con la bici nueva y sus frenos de disco y cubiertas de 32 mm bajo mucho más seguro y más rápido que antes.

Las clásicas llamas del Tourmalet.

La caravana en Hautacam.

La cuadri con el gendarme que nos acompañó todo el rato. Debíamos de tener pinta de que íbamos a empezar a correr junto a los corredores a cada momento. Qué pesado.

Vingegard y su guardia.

El viernes, los mayores fuimos de senderismo al Refugio de la Glére, junto al lago del mismo nombre. Una ruta fácil muy bonita que se inicia cerca de Baréges, a mitad del Tourmalet.

Paseo por el valle antes de llegar a la parte más empinada del final.

Foto de grupo.

El lago y el refugio.

Una cervecita a 2.154 metros sabe bien.

La bajada algunos la hicimos por los atajos en lugar de por la pista.

Y el sábado, antes de volver a Bilbao, celebré mi cumpleaños subiendo al Taillon. Hacía tiempo que quería hacer esta ruta, relativamente fácil, a un tresmil de los Pirineos.

Mar de nubes sobre Gavarnie en la subida al Col de Tentes, donde se inicia la ascensión.

El Taillon desde el aparcamiento donde empieza la ruta. Se asciende por detrás de la pared que vemos.

Alex subió con todo el equipo de fotografía y material para pasar dos noches en la montaña solo.

Foto con Alex desde el refugio de Sarradets antes de afrontar la subida a la Brecha de Roland.

Cerca ya de la Brecha. La "proa" que se ve tiene unos 100 metros de altura.

Parte final del Taillon. Salvo una pequeña trepada antes de la brecha, que asusta un poco, la subida no tiene complicaciones, pero tampoco es un paseo.

En la cima, a 3.144 metros.

Pequeño atasco en la bajada en el único punto complicado.

Preciosa vista de la cascada de Gavarnie desde el refugio.

El grupo entero en la última cena (falta Alex).