En castellano, y en otros muchos idiomas europeos, existe la expresión "Todos los caminos llevan a Roma". Este dicho antiguo viene de cuando Roma era la capital del Imperio Romano, que dominó buena parte del mundo conocido por los europeos, africanos y asiáticos desde el 27 a.C hasta el 476 d.C.
Roma, la ciudad, era la capital de ese mundo antiguo y una extensísima red de caminos de casi 400 vías y de más de 70.000 km comunicaban todas las provincias desde el norte de Europa a África con ese centro neurálgico. Así que, ciertamente, cualquier vía romana que se escogiera entonces llegaba a Roma, que era el km 0 de todas ellas.
Pues bien. Me he tomado al pie de la letra el dicho y lo he aplicado a mis entrenamientos para maratón. Concretamente, mis dos próximas citas maratonianas de aquí a verano son el Maratón de Roma, el 19 de marzo, y el Maratón de Biarritz, el 7 de mayo.
Y para prepararlas, además de correr en asfalto, estoy haciendo un poco de todo, como me gusta a mí. Al final, lo importante es disfrutar con lo que haces, y a mí me gusta correr por asfalto, pero también me gusta correr (y andar) por el monte y me gusta (lo que más) salir en bici, tanto por carretera pero también con la de gravel últimamente.
Bien. Como todos los caminos llevan al Maratón de Roma, en enero corrí el Medio Maraton de Sevilla como una tirada larga entretenida de dos horas, y luego, en febrero, corrí la Apuko Igoera Zaramillo Enkarterri, una trail exigente de 30 km con mucha subida, y el pasado sábado hice el recorrido corto de la Tierra Estella Epic Gravel, con 50 km con frío pero por caminos muy bonitos y exigentes.
En las tres carreras he disfrutado. El fin de semana en Sevilla fue muy disfrutón (a pesar de hacer frío) y lo pasamos bien los Beer Runners Bilbao. En la carrera de la Apuko me encontré bien y tardé menos de lo previsto (4 horas y 23 minutos, que sería un tiempo aceptable para Roma). Y el sábado pasado me lo pasé bien por las pistas de grava embarradas y frías de tierra Estella.
Ahora me quedan tres semanas para terminar de preparar Roma. Un par de tiradas de algo más de 20 km y algunos días de series y listo. Fondo tengo de sobra y me da lo mismo la marca que haga. Mi idea es disfrutar, sacar fotos del recorrido y terminar entero para poder seguir entrenando de cara al siguiente maratón, el de Biarritz el 7 de mayo, que es de asfalto pero es por carretera y tiene casi 500 metros de desnivel, así que será durillo.
Iremos viendo.
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